Sinaloa es el principal productor de garbanzo en el país, donde el cultivo ha sido una tradición, pero su importancia económica depende de la demanda y precio en el mercado internacional, donde tiene que competir principalmente con países asiáticos, donde el producto tiene la mayor demanda, especialmente las variedades de grano blanco y grande.

Durante el ciclo agrícola 2017-2018, en Sinaloa se sembraron 101 mil 450 hectáreas de donde se obtuvo una producción de 185 mil 895 toneladas, para un rendimiento medio de 1.832 toneladas por hectárea, sólo superado por Guanajuato, donde el rendimiento fue de 1.919.

A nivel nacional, los productores de Sinaloa participaron con el 54% del las 185 mil 711 hectáreas sembradas y aportó el 55% del volumen total cosechado en México que fue de 336 mil 086 toneladas.

Para el mercado internacional se requiere producir un garbanzo altamente diferenciado en cuanto a calidad, esto se logra con características de grano grande (calibre 40-44 granos en 30 gramos [g]), color blanco y rugosidad pronunciada, lo cual le ha permitido a la variedad Blanco Sinaloa 92 posicionarse en más de 40 países, siendo España, Argelia e Italia los compradores más sobresalientes.

Agronómicamente el problema más serio lo constituyen el complejo de patógenos causantes de la rabia del garbanzo, apareciendo a la par enfermedades del follaje como mildiu, cenicilla y botritis que causan pérdidas muy fuertes. De un promedio de rendimiento de 2.8 toneladas por hectárea, en los últimos ciclos agrícolas el promedio no alcanza las 2.0 toneladas.

 

Información disponible

A continuación le presentamos la información técnica disponible para este cultivo:

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